Si
bien la palabra EMPRENDER no se les da de igual forma a todos, lo que si es
claro es que dicen los expertos que todos nacimos con un talento especial para
algo en la vida. Ese talento puede ser desde dedicarse a la plomerÃa hasta ser
una magnÃfica secretaria.
Sin
embargo, aunque siempre hay alguien que deba hacer el trabajo (ya que sin esto
no funcionarÃan las grandes empresas) también es cierto que hay millones de
personas que trabajan en ciertos oficios, solo porque necesitan y no porque ese
oficio les llene como tal.
El
resultado de esta lamentable situación se ve reflejado en el servicio que
recibimos los clientes, tanto personal, como telefónicamente.
Estoy
segura que no hay persona en el mundo a quien no le haya tocado experimentar
una mala atención, toparse con una mala recepcionista que ni siquiera te mira a
la cara y ni te da el saludo cuando llegas.
Personalmente opino que es de los momentos más decepcionantes, porque
una recepcionista es la cara de la compañÃa que representa.
En
mi caso, cuando comencé a trabajar, mis primeros trabajos fueron como
recepcionista, ya que apenas cumplÃa la mayorÃa de edad y no tenÃa experiencia
laboral alguna, era lo más sencillo que me tocaba hacer.
Con
el paso del tiempo fui descubriendo que odiaba ese oficio, ya que me aburrÃa y
me daba sueño sin hacer casi nada y sobre todo NO ME GUSTABA HABLAR POR
TELEFONO… no era para mi, yo necesitaba algo más.
Luego
de esto pisé muchas empresas, me dediqué a varios oficios, pero en 2010, decidÃ
que ya esa era debÃa terminar y que debÃa hacer algo para mà y sobre todo para
mis hijos. Entonces decidà emprender un oficio del cual ya era aficionada desde
hacÃa algunos años atrás, me preocupé en estudiarlo, en perfeccionarlo de a
poco y al estar metida en eso, definitivamente descubrà que era lo que me
gustaba hacer. Este oficio es la costura…
Yo
querÃa crear algo bonito con mis manos y descubrà en esto, no solo una pasión,
sino un negocio que me ha dado grandes satisfacciones, he podido sacar adelante
a mis hijos y lo que es mejor ME FASCINA MI TRABAJO, ya no tenÃa que levantarme
de la cama a regañadientes, salir obligada a hacer algo que no me llenaba y
sobre todo que no pagaba bien, tampoco debÃa cumplir un horario, ¡estaba hecha!
Para
no hacer este cuento tan largo, lo que quiero transmitirles con esto es que con
un poco de imaginación, PODEMOS EMPRENDER, yo estoy segura que siempre hay algo
que a todos nos guste hacer en la vida, que nos llene y que no lo veamos como
un trabajo, sino como una pasión.
Si
te gusta barrer, limpiar… porque no emprendes en una pequeña empresa de
mantenimiento, donde puedas contratar personal que haga el trabajo por ti?
Ofrece tus servicios a las empresas y de a poco tu pequeño emprendimiento se
irá convirtiendo en una gran compañÃa…
Te
gusta el internet? Eres un haz en las redes sociales? Puedes ofrecer tus
servicios como Community Manager… te gusta dibujar, crear? Seguramente serás un
gran diseñador gráfico.
Y
como estos oficios, hay miles mas, solo tienes que descubrir en que eres bueno
y definitivamente, ser el mejor en lo que te gusta hacer… verás como de a poco
te transformas de un simple empleado a un gran empresario.
Si
no tienes idea de que te gustarÃa hacer, en internet hay miles de páginas de Ideas deEmprendimiento, donde puedes conseguir con toda seguridad, un
oficio que puedas emprender gustosamente
Para
mañana es tarde, el momento es hoy!
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